La autoestima interviene en casi todo lo que haces. Las personas con una autoestima alta rinden más en su vida y les resulta más fácil relacionarse con los demás. Tienden a tener mejores relaciones con la gente, son más felices y les cuesta menos enfrentarse a los errores, decepciones y fracasos, y es más probable que insistan en algo hasta que lo consigan. Cuesta cierto trabajo entrenarla, pero la autoestima es una habilidad que tendrás de por vida.

Si quieres mejorar tu autoestima, aquí tienes algunos consejos para empezar:

• Acepta tus pensamientos negativos sobre ti mismo y piensa potivamente. Si tu estás acostumbrado a centrar la atención en tus defectos, empieza a pensar en aspectos positivos que los contrarrestan. Acepta tus pensamientos de minusvaloración pero no centres tu atención en ellos. Cuando te des cuenta de que estás siendo demasiado crítico contigo, contrarrésta diciendo algo positivo sobre ti mismo. Cada día anota dos o tres cosas sobre ti que te hagan sentir bien.

• Ponte como objetivo el logro en vez de la perfección. Algunas personas se acaban paralizando debido a sus ansias de perfección. En lugar de frenarte con pensamientos como: «No iré a practicar natación hasta que haya perdido 10 kg», piensa en que quieres y en las cosas con las que disfrutas, y ve a por ellas. No esperes ha estar preparado y con ganas para hacer. Haz y en la medida que hacer te iras encontrando mejor y con ganas.

• «Unas veces se gana y otras se aprende». Considera los errores como oportunidades de aprendizaje. Acepta que cometerás errores porque todo el mundo los comete. Los errores forman parte del aprendizaje. Recuerda que las aptitudes de una persona están en constante desarrollo, y que cada uno sobresale en cosas diferentes es lo que hace interesante a cada uno.

• Inicia cosas nuevas. Experimenta con diferentes actividades que te pongan en contacto con tus aptitudes. Luego siéntete orgulloso de las nuevas habilidades que has adquirido.

• Identifica lo que puedes cambiar y lo que no. Si te das cuenta de que hay algo tuyo que no te hace feliz y puedes cambiarlo, empieza ahora mismo. Si se trata de algo que no puedes cambiar (como tu estatura), empieza a trabajar para quererte tal y como eres. Acéptalo, aunque no te guste.

• Fíjate objetivos. Piensa en qué te gustaría conseguir y luego diseña un plan para hacerlo. Haz un listado de acciones que te encaminan hacia lo que quieres. Ponte a ello y ves anotando tus progresos.

• Siéntete orgulloso de tus opiniones e ideas. No tengas miedo de expresarlas, es sano.

• Colabora en una labor social. Se generoso con tu entorno. Ayuda a un compañero de trabajo o un vecino que tiene algún problema, ayuda a limpiar tu barrio, participa en una maratón benéfica por una buena causa o hazte voluntario de alguna asociación. Sentir que aportas algo y que se reconoce tu ayuda hace maravillas para aumentar la autoestima. Mira este vídeo: «Descubre el secreto de la felicidad: COMPARTE». 

• ¡Haz ejercicio! Mitigarás el estrés y estarás más sano y más feliz. El deporte aumenta el estado de ánimo. No sólo alivia los síntomas depresivos, también parece evitar que se repitan.

• Disfruta y pásatelo bien. Disfruta pasando tu tiempo con personas que te importan y haciendo cosas que te gustan. Vive el momento y pásalo bien, no dejes que tu vida se guíe por lo que pudo ser o lo que podrá ser.

Aunque en algún momento habrás llegado a pensar que ya es tarde, recuerda que siempre estarás a tiempo para construir una autoestima positiva y sana. En algunas personas, cuando la herida emocional de la baja autoestima es muy profunda o duradera, es posible que sea necesaria la ayuda de un profesional de la salud mental, como un psicólogo o terapeuta. Los expertos actuamos a modo de guías, ayudando a las personas a quererse a sí mismas y que se den cuenta de lo que las hace únicas y especiales.

Miguel A. Rizaldos Lamoca