El juego patológico también llamado ludopatía, es considerado una conducta adictiva, que conlleva un déficit del control de impulsos que va aumentando con el tiempo, originando un deterioro significativo en la vida de las personas.
Las características que definen el juego patologico son el aumento progresivo de dinero que se emplea en el juego y la frecuencia de tiempo que se utiliza sumado a los cambios de conducta en función de la actividad y recompensa de euforia.
El juego es una actividad que se fomenta a través de los medios de comunicación masivos como la televisión e internet. Existen diferentes tipos de juegos en línea que incitan al usuario a participar de forma gratuita con el fin de generar más interés en jóvenes y adultos, que más tarde puede convertirse en una adicción a los juegos o ludopatía. En el caso de los casinos donde asisten diferentes personas para jugar y ganar dinero, están especialmente diseñados para que las personas pasen mucho tiempo dentro de las instalaciones, sin diferenciar si es de día o de noche, estimulando a los jugadores con comida y bebidas alcohólicas gratis con el fin de ninguna interrupción los aparte del juego.
La ludopatía es manifestada como la incapacidad para controlar el deseo de realizar apuestas trayendo como consecuencia problemas económicos por descapitalización, desunión familiar y distanciamiento social. La dependencia que genera necesidad subjetiva de mantenerse constantemente conectado con el juego para sentirse bien y en equilibrio. Y por último mantiene un estilo de vida en función del juego y antepone necesidades de comer, aseo personal y sueño en segundo plano.
Sintomas
Los criterios diagnósticos del juego patológico según en DSM-5 son:
- Preocupación por el juego
- Necesidad de jugar con cantidades crecientes de dinero para conseguir el grado de excitación deseado
- Fracasos repetidos en los esfuerzos para controlar el juego
- Inquietud o irritabilidad cuando se intenta interrumpir o detener el juego
- Utilización del juego como vía de escape de los problemas o de alivio del malestar emocional
- Intentos repetidos de recuperar el dinero perdido
- Mentiras a la familia y a los terapeutas sobre la implicación en el juego
- Puesta en peligro o pérdida de relaciones personales significativas, de trabajo o de oportunidades educativas debido al juego
- Apoyo económico reiterado por parte de la familia y de los amigos
Comorbilidad
Las personas que sufren de juego patológico, son propensos a sufrir de enfermedades como hipertensión, migraña o úlceras, presentan una alta probabilidad de cometer suicidio y se relacionan con la personalidad antisocial y narcicismo. Por tanto, el uso del azar no es considerado una actividad recreativa de diversión cuando implica descontrol y sufrimiento, ya que en ese momento deja de serlo y convertirse en el motivo de deterioro del bienestar.
Quienes padecen de juego patológico, pueden sentir la necesidad de apostar grandes cantidades de dinero que van aumentando con el tiempo a pesar de las consecuencias negativas que acarree en las diferentes áreas de su vida, ocupan sus pensamientos con pensamientos lúdicos. En muchas ocasiones intentan controlar y abandonar la conducta adictiva sin tener éxito por su dificultad para el control de impulsos
Se ha evidenciado que las conductas inadecuadas que involucran una patología lúdica como mentir, el endeudamiento económico, el abandono de las responsabilidades laborales y familiares afectan las relaciones de pareja y predisponen la aparición de otras adicciones. El ambiente familiar bajo este contexto puede llevar a la negligencia y abandono, en familias con hijos representa un peligro en el desarrollo de las conductas por influencia en los niños. En las parejas aumenta la desconfianza, el resentimiento, la irresponsabilidad, la poca capacidad de hacerse cargo de los compromisos, el sentimiento de culpa del jugador y finalmente a la ruptura y divorcio.
El juego patológico implica una problemática de salud pública que ha generado un impacto negativo en la sociedad. Implica circunstancias y motivos con factores de riesgo en problemas de comunicación, problemas de convivencia, inestabilidad afectiva, inseguridad, introversión, aislamiento, etc.
Tratamiento
El apoyo social en el tratamiento a jugadores patológicos indica que un mayor apoyo representa una mayor abstinencia de los juegos de azar, indiferentemente del tipo de tratamiento, y de forma contraria, el bajo apoyo social está relacionado con problemas psiquiátricos y poca adherencia al tratamiento. Las personas cercanas en el círculo de los jugadores contribuyen a recibir el tratamiento y a erradicar la conducta de juego.
El enfoque conductual permite analizar la conducta de juego a partir de los antecedentes, las expectativas económicas, las emociones positivas o negativas, las relaciones interpersonales, las ansias de juego, las conductas encubiertas referente al gasto implementado en el juego, las deudas, la baja autoestima, los conflictos familiares y laborales, etc.
Para evitar la adicción al juego, se pueden seguir algunos consejos:
• Establecer límites de tiempo para juga]
• Buscar actividades alternativas que sean igualmente satisfactorias
• Evitar el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir
• Buscar ayuda profesional si se siente que la adicción está fuera de control